miércoles, 7 de agosto de 2013

Este jueves; medianoche





La firma


¡No dejes que lo haga!¡Por favor, no se lo permitas! Estoy aquí, ¿no puedes sentirme?

Sé que es duro, pero no debe dudar; es la decisión correcta, su marido hace tiempo que se fue, lo que ahora contemplamos no es más que un cuerpo sin alma amarrado a un montón de máquinas.

¡Maldita sea, no! ¡Mírame! Puedo verte, olerte, escucharte, sentirte ¡Por Dios! ¡¿Cómo no te das cuenta?! Quiero gritar, correr a tu lado, abrazarte. Te quiero. Por favor, no firmes.

Muy bien, ponga aquí su nombre, con este último trámite todo habrá terminado. Séquese las lágrimas y salga de la habitación, voy a dar las últimas instrucciones al personal de la clínica, ellos se encargarán de todo.

¡Espera, espera!, ¡No me dejes solo! ¡Toma mi mano y siente mi piel!

Las ropas que se deben poner al cadáver están en el armario, junto a algunos objetos personales, colóquenlo todo en el ataúd, recuerden cerrarle los ojos.

¡Ana, Ana, vuelve, no te vayas!¡Estoy vivo, todavía estoy vivo!

En el mismo instante en que una mano áspera y huesuda oscurecía el mundo, el sonido acompasado y rítmico del respirador se apagó.



Más historias en  The Daily Planet´s



23 comentarios:

  1. Aterrador, has conseguido poner a latir mi corazón al mil por mil, menos mal que ahora me voy a la calle a distraerme.
    Horror da pensarlo y lo has descrito tan real, que de no ser el tema que es, creería que lo habías vivido.
    Esa es la magia de la escritura, tu magia.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Por un lado me disculpo por causarte tanto miedo, pero por otro me alegro, eso es que el relato quedó real. Besote y gracias por al visita.

      Eliminar
  2. Me has puesto los pelos de punta. Una escena angustiante que deja mal sabor de boca. Pero muy, muy bien escrita.
    TE felicito y te mando un besazo.

    ResponderEliminar
  3. ¡Qué miedo por Dios! Mejor no pensar que uno puede estar vivo cuando lo dan por muerto. Mejor será poner un móvil en el ataud, por si acaso.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tienes razón Carmen y también meter el cargador jejeje. Besote y gracias por pasarte

      Eliminar
  4. Te agradecemos que te hayas sumado a la propuesta.
    cariñosos saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Encantada de esta en vuestra casa. Besote compañeros

      Eliminar
  5. tétrico relato con un final sorpresivo muy bueno Alicia!! ¡muchos saludos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegra que te gustase, gracias por tus palabras y por pasarte. Besote

      Eliminar
  6. Es durísimo. Tocas algo que siempre me he planteado y que cuando he afrontado alguna situación semejante, he dudado sobre la consciencia de personas queridas aunque los médicos negaran que fuera posible.
    En resumen, que me ha llegado hondo tu relato.
    Besos.

    ResponderEliminar
  7. Ay que tremendo relato!!! Me puso la piel erizada ese final.
    Muy bueno Alicia, un placer leerte.
    Besos

    ResponderEliminar
  8. Es un excelente relato, la sensación de angustia grita por piedad y se sale.

    Un abrazo Alicia.

    ResponderEliminar
  9. Madre del amor hermoso!!!!! real, pero real, si es que parece que es una la que está enganchada a los cables, Dios que viaje!!!.
    Excelente, si señora.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  10. Interesante planteo. Ilustra algo que podría pasar, según la idea que tienen algunos. ¿Hasta que punto se puede decir que un paciente no se puede recuperar?

    ResponderEliminar
  11. Horripilante, por lo cercano y real de la historia... Y es que nadie sabe hasta que punto es consciente un ser humano en tales circunstancias...

    ResponderEliminar
  12. Qué angustia! Un relato que puede haber pasado o puede pasar, nadie sabe qué sienten y hasta qué punto no se dan cuenta de nada los que están en coma, ¿irreversible?. Mejor no pensarlo. Menos mal que una vez quitado el respirador la muerte será rápida e indolora, o eso espero.

    Besos.

    ResponderEliminar
  13. excelente. patente. impecable.
    he sentido que alguien me tiraba de la manga.
    aplausos.

    ResponderEliminar
  14. Buff!! Qué angustia por dios!Lo has contado fenomenal, como siempre.

    ResponderEliminar
  15. Asfixiante... se me ha quedado sujeto con esparadrapo en alguna parte de mi cabeza. Me voy a tomar el aire...
    Besos

    ResponderEliminar
  16. Tal vez al final haya un punto así de impreciso entre la vida y la muerte...los límites son a veces muy difusos.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  17. Realmente angustioso. Debe ser como la sensación que siente un claustrofóbico. Encerrado y sin poder salir. En este caso tu viaje ha sido sin retorno y a un lugar que no aparece en ninguna guia turística. Un beso y te acompaño en el sentimiento ;-)

    ResponderEliminar
  18. Un relato muy bien llevado, de manera que lo que han sentido mis compañeros es tal cual lo que he sentido yo, y a donde el texto apuntaba.

    Debe ser tremendo...

    un fuerte abrazo y buena semana!!!

    ResponderEliminar